dimarts, 21 d’agost del 2012

Libertad de expresión y prensa: WANTED

El otro día, en una anterior entrada a este blog, ahondaba en noticias al azar que habían sucedido a lo largo de este verano. Lo llamaba "Verano candente", y así me lo parece, aderezado por los desgraciados incendios que hemos sufrido este verano y que han costado la vida a personas que trabajaban en sus extinciones y destrozado por tanto familias enteras. Pero también ha habido otro tipo de noticias que parece que hayan surgido al amparo del verano candente... pero por las temperaturas y el deterioro del proceso neuronal de algunos de los implicados. En otra serie de circunstancias, aparte de parecer descabelladas podrían pasar por enajenaciones temporales. Eso sí, graciosas no son, ni mucho menos. Pero forman parte de la actualidad de estos días y tienen cabida para un comentario en este blog, que es tanto mío que lo escribo como tuyo que lo lees y lo sigues.

Porque no parece graciosa la sentencia que se les imputa al grupo ruso femenino de rock "Pussy Riot". Cuando mezclamos libertad de expresión, religión y dictocracia, pasan este tipo de cuestiones; como es el de ser condenadas a dos años de prisión por entrar en una catedral ortodoxa y criticar al Presidente del Pais, Vladimir Putin. Aunque no hace falta ponerse las manos en la cabeza. En nuestra pequeña patria, la misma que manejan Roucos, Gallardones y secuaces, hace poco tiempo también se quería condenar por blasfemia a un artista, como lo es Javier Krahe, por una acción cometida hace 30 años. Al final la reflexión a la cual llegamos de forma inexorable es la necesaria laicidad en nuestras instituciones y gobiernos. El deber de reírnos de nosotros mismos y respetar las críticas. La imperiosa falta de libertad de expresión en nuestro tiempo. Aquella libertad que se deja construir y que se muestra como tolerante siempre y cuando no nos toque. Y que cuando afecta a uno mismo se procede a reprimir. Y eso señoras y señores, lo continuamos denunciando tal año como este, bien entrado el siglo XXI, aunque parezca mentira.

Y no me voy a ir demasiado de contexto en los dos próximos temas que quería comentar. Seguirán esa misma vertiente, la de la libertad de expresión y la libertad de prensa. Por un lado Facua. Por otro Assange. Vayamos por partes empezando por éste último. La torpeza diplomática del Reino Unido ralla lo intolerable. Recordemos la paradoja que roza el absurdo: en el año 2000 desde Downing Street no querían extraditar a Pinochet, y ahora fuerzan la maquinaría para poder conseguirlo con un periodista. Las amenazas veladas en contra de la embajada de Ecuador, permiten prever la definición de UK sobre los paises: unos son de primera y otros de segunda. No hace falta especificar en que nivel creen los británicos que se encuentra Ecuador. No creo que en el caso de ser otro pais de más pujanza el implicado, que las formas hubieran sido las mismas. A pesar de todo, el otro día escuchaba en radio una periodista del país sudamericano: se le quiere dar un tratamiento de libertad de prensa a una persona, (perfecto), mientras ellos luchan día a día ya no por conseguirla sin resultado alguno, sino por no tener represalias de ese mismo Gobierno Correa que defiende Assange. Otra paradoja más en el universo de las vanidades de los países y las oligarquías.

Aún así, todo lo que se acerca y concierne este tema, con presuntos delitos de agresión sexual, bajada de pantalones a los Estados Unidos por parte de una plataforma de publicación de documentos, etc... me recuerda mucho a la tercera parte de la saga Millenium de Stieg Larsson, que recientemente he releído otra vez. Para grupos y/o grupúsculos de poder, para naciones intolerantes y regímenes totalitarios hay cosas que no deben saberse, acciones en las que se actúa con total impunidad. Para poder borrar aquello que no gusta las acciones emprendidas se parecen misteriosamente a las mismas situaciones que ocurren en una novela negra: desacreditación del personaje que difunde la noticia, negación y opacidad. Miro a Assange y me recuerda mi querido personaje literario Mikael Blomkvist. No sé en que punto diferirán, pero reconozco sus semblanzas. Al final de todo lo queramos debatir, de lo que pensemos cada uno, hay una realidad inequívoca, una cuestión que subyace, una nueva lucha por la libertad de prensa.

Un apunte pequeño más acerca de la pretendida libertad de prensa antes de pasar al tema Facua, sobre esa "regeneración" que se está produciendo en RTVE. Cambios ingentes en la televisión pública estatal. Un modelo laureado y aclamado por crítica y público se desmantela. Se acallan y despiden aquellos que no se someten a las doctrinas propias del partido que dirige el estado. La gente contratada, gente afín, de medios de dudosa calidad pero que atienden bien a la línea editorial marcada. Se ha puesto en peligro la pluralidad informativa. Una nueva afrenta a la prensa. La radicalización de los medios de comunicación ponen en un brete la convivencia entre todos, la tolerancia de unos con otros, el sano debate y confrontación de las ideas; y hacen germinar las raíces del virus de la intransigencia, un germen poco sano para un Estado democrático.

Y finalmente Facua. Si antes decíamos que quienes estaban torpes en un tema como el de Wikileaks era el departamento diplomático inglés; en este caso más que torpes o torpones, se les podría denominar irresponsables al Gobierno de España y en particular al departamento de Sanidad; aquel mismo que preside una mujer que no se daba cuenta que tenía un coche de la envergadura de un Jaguar por casa, regalo de los vampiros de lo ajeno. Vayamos por partes: Facua defiende a los consumidores españoles y como tal constituye su asociación. Si a sus consumidores potenciales se les recortan los derechos sea por parte de una empresa privada o de una institución pública... ¿qué deben de hacer?. Doy por supuesto que defenderlos. Pero no es el mismo criterio que tienen desde el Ministerio. Toda crítica que pueda ser erradicada, debe serlo. Cualquier organismo que se entrometa, debe ser entorpecida en sus funciones.

Y es que como escuchaba a José Luis Sampedro hace unos días en la redifusión de una entrevista concedida a un programa de televisión: "El miedo por desgracia es más fuerte que el amor o el altruismo". Ese miedo al que se quiere someter a la sociedad para mantenerla acallada, da nuevos pasos. La censura para unas cosas y la desinformación para otras crece en una sociedad marcada por el constante flujo de novedades que recibe. Tal vez no se practique del mismo modo esa erradicación de la libertad de expresión y de prensa que la que tuvimos en este país durante más de cuarenta años, pero es una versión modificada y regenerada. Y es que como decía en el título de esta entrada del blog: Libertad de expresión y de prensa: se busca, wanted.

dijous, 16 d’agost del 2012

Verano candente

Sequía bloguera. Así podría determinar estos casi dos meses de paréntesis que le he dado al blog. En un primer término porque julio fue un infierno de trabajo y por otro lado, porque los primeros días de agosto los había reservado para la meditación y el reencuentro conmigo mismo.

Pero todo eso queda ya atrás y me encamino a hacer, como en tantas otras ocasiones un pequeño recopilatorio de noticias. No ha sido un verano fácil. La economía, los derechos de los ciudadanos cada vez más mermados, los incendios y la relaciones diplomáticas no han dejado tiempo para el descanso; y han ofrecido un verano de actividad constante.

Un verano, que si bien se ha caracterizado por las perpétuas vacaciones de un Gobierno que ni está, ni se le espera (al menos para ofrecer una buena noticia...) y que de todas formas huye y se esconde de sus responsabilidades; ha tenido demasiados frentes abiertos sin que el pueblo pudiera discernir una voz autorizada que nos dijera qué pasaba. Desgraciadamente los incendios alrededor de España ha sido una de las constantes durante estos meses. Uno de ellos en mi propia ciudad y otro en un municipio cercano, que sesgó la vida de dos personas, de dos familias. Actitud heróica la de aquellos que han estado al pie del cañón en cada incendio que se ha producido en nuestro país. Demostración avestrucil de nuestros dirigentes. Los incendios sin duda, se apagan en invierno. Aunque sea por puro sentido práctico y ahorrativo, ya que cada nuevo fuego cuesta alrededor de 150 veces más, que lo que se ahorra en su prevención. No hay que olvidar que nuestro patrimonio natural, visto lo visto, será lo único que podamos legar a nuestros descendientes. Así que hay que cuidarlo... y no estamos haciendo lo necesario.

Los recortes que han llevado a descuidar la prevención de nuestros Parques Naturales, afectan día a día la economía de todos los vecinos de cualquier municipio de España. Lo que antes estaba mal, ahora está peor con el añadido de una reducción de derechos tal, que será muy complicado recuperarlos de nuevo en un periodo de tiempo razonable. Ha venido bien la excusa de la crisis para ir haciendo pedacitos el Estado de Derecho que entre todos y todas habíamos construido, para ir repartiendo los cachitos entre aquellos que sin alma, quieran comprarlo con el amparo y la complicidad de nuestros gobernantes.

Por un lado, medidas ideológicas con argumentos excusativos en forma de Herencia Recibida como el recorte del subsidio del desempleo, el abaratamiento del despido, la subida de tasas universitarias, el copago farmacéutico y el incremento del IVA. Por otro lado, van adoptando al mismo tiempo "medidas anticrisis" como lo son la modificación del IVE (del aborto) por poner un caso. Evidentemente a consecuencia de la crisis, por supuesto (sarcasmo modo "on"). Lo dicho, de mal en peor, sin pasar por la casilla de salida.

El mundo se vuelve loco. La prima de riesgo es una más de nuestra familia, de la que hablamos día sí, día también a la hora de la comida como una pariente lejana. Analizamos a Merkel, como la vecina molesta del 4rto derecha. A Draghi como el administrador tonto de la finca, que no se sabe de dónde sale, pero que tiene la última palabra en todas las decisiones de nuestra casa. Y encima, ahora los de "United Kingdom", queriéndose saltar todas las leyes diplomáticas para atrapar a ese enemigo público llamado Assange, cuyo único error ha sido la de informar de cosas que no gustaban demasiado allende los mares (y lo que le quedará por desvelar...que será otro tanto...). Eso sin hablar de los cachorrillos de Nuevas Generaciones del Partido Popular, que ahora juegan a ser James Bond en Cuba, saliéndoles el tiro por la culata, y constándole la vida a dos jóvenes cubanos. Encima chapuzas...

Verano loco, verano candente. Y aún nos quedan 15 días...